Una idea inconcebible
se deja llevar por casualidad
de la mano de mi propio pudor
quizá para ver qué se siente
ante la severidad de los hechos ...
esos hechos que no dejan de existir
sólo porque éstos sean ignorados
Y mientras con cara de vergüenza
busco mi propia redención,
sé que sólo mis ojos en la oscuridad
nunca podrán sacarme de ella.
Solo la luz divina puede hacerlo
en su propio goce individual
mientras me guía hacia una mejor eternidad:
la mía propia
Quizá ya no me basta revelar más
este pesado acento de diferencias narcisistas
que existen entre tú y yo
Acaso, ¿buscas la rendición en secreto?
Y mientras te devuelvo la sonrisa
(bello maquillaje del alma),
tú apartas la mirada
entre gritos, insultos y súplicas
por ignorar que cuanto más atrás mires,
más adelante verás tu camino a seguir
porque la reflexión es el mejor camino
hacia tu propia inmortalidad
¡Agujerearte el corazón no quiero!
No es, del todo, necesario
aunque un vacío inmenso de contenidos
apuesten, una y otra vez, peligrosamente
con una gran naturalidad sorprendente
ante tus propios prejuicios morales
y ante los míos también
Quizá sólo por costumbre ...
esa costumbre vacía de toda luz divina
por insistir tercamente en vivir sólo dentro de sombras
MARiSOL
