Empezar desde cero, desde esa esquina inexistente
donde nadie me ve completamente
entre burbujas de despreocupación
y en la soledad de melancolías repetitivas
Así me siento, y sin embargo, aquí estoy
rodeándome de mis pensamientos ...
esos pensamientos que no llegan a ninguna parte
mas de manera informal experimentan
un ansia desbordante con sabor a un desenlace
raudo, eufórico y luminoso
entre argumentos verdaderamente convincentes
y desolados y tristes encuentros con esa verdad...
aquélla, que en aparente complicidad,
cruza la calle a lo desconocido
aunque su desenlace sea escasamente prometedor
mientras mantengo la calma forzadamente
por las circunstancias evidentes
a las cuales estoy expuesta por fuerza mayor
y que se dejan ver a la vera del camino
inequívoco e incómodo
dejado por las huellas de mi destino ...
ese destino que no consigue descifrar
el significado de mi propio ensimismamiento
Y mientras yo cambio de opinión,
mantengo intactas mis raíces y principios morales,
repaso las hojas aún no escritas de mi vida
quizá porque la historia es la novela de los hechos
(consumados o todavía por realizar por mí)
y la novela es la historia de los sentimientos...
esos sentimientos vestidos de recogimiento
en la intimidad de mi alma
MARiSOL
