miércoles, 14 de junio de 2017

Placer perdido




Mientras mis manos avanzan de nuevo hacia ti
sin nada más de dudas y estupores,
hay un  silencio gigante que brilla como un sol
y que palpita entre mis muchos papeles arrugados ...
allí donde los sentimientos del alma
no pueden ser solamente analizados
Y mientras la tinta azul se vuelve roja 
por ti y ¿por qué no? también por mí,
veo como un placer perdido se viste sólo de recuerdos
(ésos que mueven nuestros mundos
aunque nuestros pensamientos
los contradigan, por fuerza mayor,
para no ahogarnos en puro sentimentalismo)
 que no sólo nos puebla por dentro,
sino que vive intacto
entre tu mirada y la mía
aunque un punto de dolor o hasta de tedio
implore por sobrevivirnos
mientras revivimos nuestros recuerdos
y nos resistimos a olvidarnos
porque la memoria del corazón
lamentablemente tiene la facultad de acordarse,
aunque ni tú ni yo así lo queramos,
de todo aquello que quisiéramos olvidar ...
de ese mañana que nunca llegará a existir
mientras ella abre un paréntesis
entre mis penas y las tuyas
para revivir a ese placer perdido
que nos añora ahora y siempre


MARiSOL