martes, 4 de febrero de 2014

Pintando la vida



Mientras tú pintas la vida con tus propios colores,
yo en silencio camino a tu encuentro.
Interrumpirte no quiero y, sin embargo, lo hago
 para que me ayudes a sofocar aquellos pensamientos
 que me ponen de rodillas cuando la soledad me da miedo.
¡Ay! es que el miedo no sólo ahuyenta al amor, 
sino también a la inteligencia, 
y a todo pensamiento de belleza y verdad.
No quiero que la desesperación me atrape
(¿será cierto que casi todas las personas vivimos la vida
 en una silenciosa desesperación?)
 porque el miedo puede llegarme a expulsar 
de mi propia pintura de vida. 

Marisol


Imagen sacada de google