Te regalo un hermoso sol para que apartes
esas nubes negras vestidas de largos silencios.
Desde el fondo de mi inocencia perdida
-aunque yo no pueda entenderte-
te deseo amor y paz en tu alma
ahora cuando tú me leas,
mañana cuando tú me olvides
y siempre cuando yo me acuerde de ti.
Marisol