domingo, 16 de agosto de 2009

Descifrando mi destino

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_ifIq5vCs9-BPGs64TWsKahObP6JMNGHVMCwr7xUR__6caqOBCs5YOKSO01jvDJ-H_yg4XzhvzGoOiJ5GmCcbk5w9aC0OPGC8u6ABjjC8tr0FdVobVvLWvdUDd_N6Wb5LR9r2Ucve_Byr/s1600/Margaritas-al-atardecer-2.jpg
Decido dedicarme a no deambular distraída por allí
declamando discursos desatinados
y deshojando despacio delic
adas margaritas,
sino a descifrar detalladamente mi destino...

Me desconozco en este drama,
mas debo defenderme para no desaparecer...

¿Es acaso un desvarío, un disparate?

No quiero sentirme ni deprimida
ni derrotada ni desalentada ni desconsolada
ni desquiciada ni deshecha ni a la deriva
ni tampoco ni desdichada ni desesperada.

Un divorcio no debe ni destruirnos ni derrumbarnos....
sólo nos desarregla el defraudado corazón,
nos descompone por un determinado tiempo,
nos descolorea la vida... despertamos desencajados
dejando al descubierto y descalzas
nuestras desoladas debilidades...

Mas, si la dialéctica y diálogo se desarrollan
dentro de un clima decente y discreto
sin discordias, desprecios y desdenes,
no habrá dolor ni decepción
que dure y duela de por vida.

Domino y doblego mi lengua 
para no destilar veneno...

Marisol

He tratado de jugar lo más que he podido con la letra "D".

Imagen sacada de
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