miércoles, 21 de mayo de 2014

Ausencias






Entre miles de ausencias perpetuas 
y palabras no dichas directamente por ti
sólo quedan cenizas de vagos recuerdos. 
Gritos de ecos lejanos quedan mudos a mis oídos.
Sigo yo sin entender este menudo enredo. 
Por el amor de Dios, ¿en qué andas?
Manila de Luzón me  reta a no tocar el pasado.
Soy terca y me hago daño en el intento de olvidarte. 
Mas yo no le hago caso  a tu dueña, mi rival.
No sé hasta cuándo pueda yo seguir sosteniendo
el perfume de color violeta entre mis recuerdos.



MARISOL

Imagen sacada de bing