Mientras alguien me da una respuesta
que no se corresponde con lo que yo le cuestiono,
una pregunta comprometida se esconde cobardemente
tras unas gafas de sol imaginarias
Ser observada no quiere
ni por ti, ni por mí, ni por nadie
Y mientras tú o yo cambiemos de tema
en mitad de una conversación o de un discurso
para no referimos a cuestiones
que no guardan relación
con el objeto de la discusión,
entonces nuestra conversación
(expresión real de nuestro modo de pensar),
terminará careciendo de toda validez
porque tanto tú como yo nos esforzamos
tercamente por irnos por la tangente
mientras nuestras gafas de sol imaginarias
se esfuerzan por eludir a la ética
de nuestras responsabilidades y principios
cobardemente
MARiSOL
MARiSOL
