domingo, 8 de octubre de 2023

Un mal presagio

 

 

No encuentro las palabras adecuadas para expresar lo que siento. Pero, permanecer inmutable es imposible. Frenar en seco a tanta maldad no es imposible pero es una tarea muy difícil de cumplir. La historia se repite. ¡Ay! En un arranque de autoridad pido paz. Mas, ¿cómo instaurarla?  La historia de Israel está marcada por relaciones tumultuosas y ocho guerras oficialaes con sus vecinos árabes.

Rechazo contundentemente la crueldad no importando las banderas. No hay excusa alguna ni argumento valedero para justificar un comportamiento salvaje aunque razón tengan los invasores. Y, sin embargo, desde los tiempos de Abraham hasta nuestros días  están en conflicto Israel y Palestina y éste no cesa, porque no se ponen de acuerdo. Mientras Israel reclama soberanía sobre la ciudad sagrada para judíos, musulmanes y cristianos y asegura que es su capital tras tomar Jerusalén Oriental en 1967, Palestina reclama el derecho a la autodeterminación de la población palestina, la creación de un Estado en Cisjordania y Gaza con capital en Jerusalén Este y el retorno de los refugiados tal como rezan las resoluciones de las Naciones Unidas.

Terrible que los militantes palestinos del grupo Hamas (ante mis ojos son terroristas) hayan disparado miles de cohetes y tomaran ayer por asalto zonas del sur de Israel infiltrándose en 22 ciudades y secuestrando decenas de personas civiles israelitas.  

Peligrosa es esta guerra que recién empieza porque si hay más derramamiento de sangre, esta situación puede escalar, sobre todo, porque Irán (otros países árabes igualmente) apoya incondicionalemente a Palestina y los EEUU hacen lo mismo defendiendo a capa y espada a Israel.  

Esta tranquilidad turbada deja constancia de los días de desamor que mantendrá al mundo en un hilo, al filo de la navaja entre el odio y la venganza por defender ambas partes sus propios intereses. La verdad que soy incapaz de reprimir esta pena porque los argumentos convincentes quedan de lado dando paso a un desenlace nada prometedor ante una invasión abrupta y cruel. 

Espero equivocarme pero esta guerra entre Israel y Palestina puede escalar a nivel mundial. Ya no sólo Rusia y Ucrania están en guerra, sino esta otra nos termina de explotar en la cara haciéndonos recordar  que la guerra entre ambos países empezó en 1948 cuando se produjo la descolonización de Palestina del Reino Unido por resolución de las Naciones Unidas.  Pues bien, cuando los británicos abandonaron Palestina, tanto este país como las Naciones Unidas decidieron que hubieran dos estados, uno judío y otro palestino y ambos con capital en Jerusalén. Es aquí donde empieza el conflicto ....

Esto que aquí escribo no es poesía, es un mal presagio.

 

MARISOL