Vuelvo, una vez más, con fuerza
a descansar un momento
mientras soporto la idea de salir del pozo
en que me encuentro ahora
quizás para completar de una vez por todas
el abecedario que ya no quiero
por representar un sistema demasiado ordenado
de signos gráficos que se emplean
entre tu lengua y la mía
Más bien, con entereza admirable
yo habito el inolvidable olvido
en un arranque de autoridad
para no producir odio con tanta severidad
mientras dirijo mi propia vida
lo mejor que puedo
Quizá sea sólo una reacción anticipada
mientras cambio de tono y mudo mi lengua
porque yo he creado mi propio mundo
aunque no quiera hurgar demasiado en el pasado
y, más bien, crea en la existencia de mis últimos días
¡Ay! La historia se repite, sin lugar a dudas
aunque en principio, frene yo en seco
mientras pienso que debo primero evaporarme
de este mundo: la suma total de mis posibilidades reales
No creo que a ti te importe
lo que yo aquí piense
¿O será que te puede interesar
estar al tanto de mi vida?
Y es que en el fondo, al final,
son las relaciones con las personas
los que dan realmente sentido a la vida
No sé si a la tuya, pero a la mia, sí.
Y mientras mi mente registra lo impronunciable
para no ofender la moral y buen gusto
de unos y otros (¿los conozco?),
yo prefiero despojarme de tanta falsa cortesía
mientras permanezco inmutable
ante esas cosas inesperadas
que en apariencia podrían suceder
porque mientras la historia de nuestras vidas
cuenta lo que realmente sucedió,
la poesía de nuestros sueños nos dice
lo que debería suceder
y, al final, no sucederá
por A, B o C
MARiSOL