Mientras tú pintas la vida con tus propios colores,
yo en silencio camino a tu encuentro.
Interrumpirte no quiero y, sin embargo, lo hago
para que me ayudes a sofocar aquellos pensamientos
que me ponen de rodillas cuando la soledad me da miedo.
¡Ay! es que el miedo no sólo ahuyenta al amor,
sino también a la inteligencia,
y a todo pensamiento de belleza y verdad.
sino también a la inteligencia,
y a todo pensamiento de belleza y verdad.
No quiero que la desesperación me atrape
(¿será cierto que casi todas las personas vivimos la vida
en una silenciosa desesperación?)
porque el miedo puede llegarme a expulsar
de mi propia pintura de vida.
Marisol
Imagen sacada de google