domingo, 5 de enero de 2025

Conciencia


 

Si bien no puedo desalentar al azar  

ante este mundo tan cambiante,

tal vez, debería construirme un escondite

en algún lugar imaginario

con la intención de borrar todas mis culpas...

aquéllas que apenas se distinguen

a través de la neblina de mi memoria

 

Así, unas veces, sea yo un alma en pena

y otras, un alma en gloria,

siento como si perdiese mi rumbo

entre sueños y vigilias...

ese rumbo marcado por fantasmas taciturnos

que alumbran mi camino de vida

para ver más nítidamente 

cómo el desastre se apropia del mundo

mientras la alegría me busca

 para abrazarme a escondidas


Y mientras la eternidad,

allí donde no existe ni espacio ni tiempo,

aburrida de tan poca transparencia humana,

cierra los ojos ante tanto desamor

para no ver cómo nos hace trizas el alma,

una tristeza inexpungable nace

 y muere sin excusas

ante los pies de nuestra conciencia ...

aquella voz del alma que nos recuerda

que es testigo, fiscal y juez

por ser la presencia de Dios 

en cada uno de nosotros


MARiSOL